Tras la alegría en la Copa Argentina, el Mirasol igualó sin goles ante San Telmo y volvió a exhibir todos los problemas que lo llevaron a encadenar once partidos sin triunfos y a hundirse en el sótano de la tabla. El equipo de Bazán Vera tuvo voluntad, pero le faltó ingenio para doblegar a un Candombero que siempre se mostró más sólido.
Son tiempos difíciles los que se viven en Almirante Brown. Alcanzan los dedos de una mano para contar los momentos felices que vivió en 2024. Y cuando suceden, la satisfacción dura muy poco. Apenas cinco días después de la hermosa tarde noche santafesina, en la que eliminó a San Martín de Tucumán en la Copa Argentina, el Mirasol volvió a la dura realidad que padece en el torneo de la Primera Nacional: igualó 0 a 0 ante San Telmo y llegó a los once partidos sin ganar en el campeonato.
El buen presente que disfruta el Candombero hacía suponer que el conjunto aurinegro iba a tener un encuentro complicado. Y esa presunción se cumplió. Ya de entrada, el equipo de Alfredo Grelak exhibió sus credenciales y antes de los cinco minutos ya había estremecido dos veces los palos del arco defendido por Ramiro Martínez, con fuertes disparos de Iñaki Larthirigoyen y Franco Ayunta.
Tras ese alarmante comienzo, el equipo de Daniel Bazán Vera logró acomodarse mejor en la cancha y emparejó el juego. Sin demasiada claridad, ya que solo pudo inquietar al arquero Brian Bustos con una definición fallida de Tomás Almada y un zurdazo desde afuera del área de Tomás Díaz.
En el complemento, el partido fue bastante más chato que en la etapa inicial. La pelota estuvo mucho tiempo por el aire y ninguno supo cómo generar peligro en el arco rival. Así, entre San Telmo que se fue conformando con la igualdad a medida que pasaban los minutos; y Almirante, que profundizó la escasez de ideas que evidenció a lo largo de todo el certamen, el 0-0 se transformo en un desenlace inevitable.
Se viene un rival directo
Con este empate, el Mirasol acumuló su undécimo partido sin ganar (cinco derrotas y seis empates) y sigue hundido en la tabla.
En la próxima fecha, Almirante intentará cortar esa infausta racha cuando visite a Rafaela, otro equipo que atraviesa un mal momento y que se ubica solo tres puntos por delante en la tabla. Será una gran ocasión para enderezar el rumbo de una buena vez por todas y, de paso, generarle más preocupación a un rival directo en la lucha por salir del fondo.
