Gracias al gol de penal de Damián Anriquez en los últimos segundos del partido, Ituzaingó superó 2 a 1 a Liniers, se consagró campeón del torneo de Primera D y vuelve a la C.
Su entrenador, Diego Ayoroa, expresó su alegría después del partido:
"Esto es el premio a un grupo que tiene una humildad deportiva muy grande. Eso creo que fue el punto a favor que tuvimos durante todo el campeonato. En el fútbol, que es lo que amamos nosotros, no siempre se necesita superar técnicamente, tácticamente o fisícamente a los rivales. Acá lo importante es que hay un trasfondo de valores, de esfuerzo, de sacrificio, de generosidad. Este grupo siempre lo sacó a relucir, así que creemos que somos unos justos campeones"
Al momento del penal, el entrenador se quebró emocionalmente: "Sí, porque es un desahogo muy grande. Es un club donde me inicié como jugador, soy bien del riñon del club. Hace un año estaba dirigiendo la séptima y octava división. Confiaron en mí y esto también es un premio para la Comisión Directiva. No quiero olvidarme de nadie. Es un logro que excede solamente al grupo de jugadores y cuerpo técnico. Acá hay gente y lo pudimos sacar adelante"
"Como jugador tenés la posibilidad de eliminar tensiones dentro de la cancha, corriendo. Como técnico es una cosa completamente diferente porque hasta el final yo trataba de no desbordarme, de no perder el enfoque de lo que teníamos que hacer porque esto era muy cambiante. Sabíamos que el gran equipo de Alem estaba ganando, no nos podíamos descuidar porque tuvimos que pelearlo hasta el final"
